Resumen:
El vaciado de las lagunas de almacenamiento de purines en tambos puede tener beneficios
ambientales y económicos. No obstante, la alta concentración de nitrógeno (N) del purín
estimula la volatilización del amoníaco (NH3) y la emisión indirecta de óxido nitroso (N2O).
Para abordar este tema, se llevó a cabo un experimento con el objetivo de medir la
volatilización de NH3 en un cultivo de maíz para silaje fertilizado con purín de tambo o urea,
ajustando la cantidad de N aplicado por el método del balance. El flujo se cuantificó
utilizando un sistema estático y las mediciones se realizaron frecuentemente durante los
primeros días luego de la fertilización (días 1, 2, 3, 4, 5, 9, 16, 23) y al final del ciclo del
cultivo (día 84). Inicialmente, la tasa de volatilización de NH3 fue mayor con purín que con
urea (2,7±0,25 vs 1,1±0,25 kg N-NH3 ha-1 dia-1) (p<0,05). Sin embargo, durante los días
siguientes la tasa de volatilización de las parcelas fertilizadas con purín disminuyó de forma
gradual y, a partir del día 4, la tasa de volatilización fue mayor con urea que con purín
(P<0,05). Por otro lado, el 50% de las pérdidas se produjeron en menor cantidad en las
parcelas fertilizadas con purín que en las fertilizadas con urea (2,30±0,82 y 5.90±0,76 kg N-
NH3 ha-1 dia-1) (P<0,05), aunque la volatilización de NH3 acumulada máxima fue mayor para
urea que para purín (12,66±0,63 y 6,43±0,65 kg N-NH3 ha-1) (P<0,05). Con respecto a la
emisión indirecta de N2O calculada a partir de la volatilización acumulada de cada
tratamiento, fue mayor en las parcelas fertilizadas con urea (0,14±0,01 kg N-N2O ha-1) que
en las fertilizadas con purín (0,06±0,01 kg N-N2O ha-1) y que en las parcelas control
(0,03±0,001 kg N-N2O ha-1) (P<0,05). Al momento del corte, la biomasa aérea de maíz
promedio fue 19±0,7 t MS ha-1 y el contenido de N en biomasa aérea promedio fue de
228±11 kg N ha-1, y similares entre tratamientos fertilizados y el control. Las salidas
gaseosas netas totales (descontando las emitidas por el control sin fertilización) fueron
mayores con urea que con purín, expresadas por unidad de superficie (10,58±2,09 y
2,92±1,20 kg N ha-1) o de producción de biomasa (0,52±0,10 y 0,17±0,07 kg N t MS-1).
Estos resultados demuestran que la fertilización con purines es una práctica prometedora
para reducir el impacto ambiental de los tambos de la región.